En la semana, mientras nuestra planta recibía su acostumbrada fuente de vida, también llamada agua, nos dimos cuenta de que una pequeña bolita roja se veía salir de la tierra.
Al verla más de cerca lo vimos, !Es un rábano!
Aunque es pequeño, y tal vez no del todo bello, ver los frutos del esfuerzo y del trabajo que hemos estado haciendo durante estos meses es algo muy conmovedor y por supuesto un hecho del que estamos orgullosas.
Esperamos que tu como nosotras también veas los frutos de tu esfuerzo muy pronto.
Sylvia Cárdenas
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